Fraude
Por Conchita Hinojosa.
Le hizo la parada al pesero. Iba a reventar. Como pudo, la
mujer entró. Pronto sintió que alguien se pegaba a su cuerpo con insistencia.
Le metieron mano por todas partes. Quiso gritarle al intruso, pero no pudo.
Alguien más dijo “bajan” unas cuadras adelante. En esa esquina dejaron el
vehículo más de diez personas. Se sintió defraudada, molesta. Nunca le gustó
que las cosas quedaran inconclusas.
De Brevedad urbana Antología de microrrelato en la ciudad (ALJA Ediciones, 2012).
Imagen: Voces del periodista.
pulcro y suficiente
ResponderEliminarMe gusta el humor del texto. Saludos, Bob.
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